A fuerza ni los zapatos entran….
A fuerza ni los zapatos entran….A fuerzas ni los zapatos entran y si entran aprietan…
No
puedes forzar a alguien a hacer lo que no quiere, así como nadie puede
obligarte a hacer lo que no quieres. A veces actuamos así adaptándonos a
situaciones o personas que no nos hacen felices, nos volvemos flexibles perdiendo nuestra autenticidad volcándonos en otros aun sabiendo que ellos nos hacen daño muchas
personas toman esta actitud como una
forma de vida
¿Pero
por que actúan así? Por qué buscan
sentirse seguros. Ya que sufren una carencia emocional y con esta actitud,
buscan la aprobación de los demás ¿Qué ganamos calzando esos dolorosos zapatos?
Nada
de lo que no tiene que ser será por la fuerza, lo mejor es dejar que las cosas
fluyan, serás más feliz y no desperdiciarás tu tiempo en imposibles.
Por ejemplo:
No puedes elegir ser doctor solo porque
en tu familia. Hay una generación de médicos entonces se convirtió en
una “tradición “que todos estudien medicina. Si a ti no te gusta serás un médico mediocre. Porque harás las cosas
por obligación, y será tiempo de tu vida que hayas perdido
Ejemplo2: No
puedes obligar a alguien a estar a tu lado: A veces queremos imponer nuestra
voluntad por encima de la otra persona, y usamos el chantaje para que
permanezcan a nuestro lado, y no paramos a pensar que estamos dañando al otro y a la par nos
estamos autodestruyendo.
Nadie puede obligarte a hacer algo que no quieres:
“No es necesario estar rodeado para ser valorado, el león camina solo, mientras
la oveja camina en manada “
“La Chica Rebelde”
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